Cuando en casa hay animales o niños, debemos tener cuidado con la decoración. No todas están a prueba de hocicos curiosos, y sin darnos cuenta, podemos estar poniendo al alcance de nuestros perros y gatos objetos peligrosos para ellos.

Este es el caso de algunas de las plantas más típicas de esta época, quedan preciosas en nuestro hogar, pero para nuestros animales pueden suponer un peligro si las ingieren, incluso en algunos casos solo el roce con la piel es peligroso.

¿Quieres saber cuáles son estas plantas y por qué son peligrosas? ¡Sigue leyendo!

Flor de Pascua, de Navidad o Poinsettia.

Esta planta de hojas rojas brillantes se ha convertido en una de las plantas ornamentales típicas de la Navidad, pero no hay que olvidar su toxicidad para perros y gatos. Todas sus partes son tóxicas, pero hay que prestar especial atención a su savia al contener sustancias irritantes. El contacto directo de la savia con los ojos o piel puede desencadenar en trastornos oculares más o menos graves según la dosis, y dermatitis con picor, irritación, edema, incluso la aparición de ampollas. Si las hojas son ingeridas, normalmente causan náuseas y vómitos, dolor abdominal, salivación e irritación de mucosas, pero por suerte, es necesaria una gran cantidad de la planta para causar envenenamiento.

Acebo y muérdago.

Son menos comunes en los hogares españoles, pero su ingestión también es tóxica para nuestros animales, teniendo mayor nivel de toxicidad que la Flor de Pascua. En ambos casos, el cuadro tóxico suele asociarse con la ingestión de las bayas o frutos, apareciendo malestar, vómitos y diarrea, babeo excesivo y dolor abdominal.

El muérdago contiene múltiples sustancias que son tóxicas tanto para perros como para gatos, no solo puede causar un malestar intestinal grave, si no también una caída repentina de la presión arterial, problemas respiratorios e incluso alucinaciones.

Para evitar accidentes, lo mejor es que las hojas y las bayas de estas plantas se mantengan fuera del alcance de nuestros compañeros de vida.

Árbol de Navidad.

Dejando a un lado que la decoración del árbol (luces y objetos colgantes) puede resultar tan tentadora para perros y gatos como peligrosa, no debemos olvidarnos del árbol en sí.

La tendencia es adornar nuestros hogares con árboles artificiales, pero si eres de los que prefieren un abeto natural, seguro que agradecerás saber que los aceites producidos por los abetos pueden irritar la boca y el estómago de las mascotas, causando vómitos excesivos o babeo. Por otro lado, las hojas en forma de aguja de este tipo de árboles pueden causar irritación gastrointestinal, obstrucción y punción, siendo una causa de urgencia veterinaria si esto sucede.

Así que ya sabes, a disfrutar de la época navideña pero sin olvidar la seguridad y bienestar de nuestros amigos de 4 patas. ¡Felices fiestas!