A los humanos que convivimos con gatos, nos encanta visitar las tiendas de accesorios para animales y comprar a nuestros pequeños mimados ratoncitos, pececitos, pelotas, cañas, rascadores, casetitas, camitas, cojines,… en fin, que somos capaces de dejarnos medio sueldo si hace falta con tal de llegar a casa y ver cómo nuestros peques se lo pasan pipa… O no, porque seguro que te suena aparecer ilusionado con una caja que contiene un montón de juguetes, y que lo que más le guste a tu gato sea la caja… ¡son únicos!

Entonces, ¿cómo podemos ofrecer continuamente diversión nueva a nuestros gatos sin gastarnos demasiado dinero? Con el “Do it yourself” gatuno, ¡por supuesto! ¿Qué opción de las que te proponemos vas a crear primero?

Las cajas, lo mejor de lo mejor si eres un gato.

Como comentábamos, ¿cuántas veces has encontrado a tu minino dentro de alguna caja que tienes por casa? Les suelen gustar mucho, así que si las reutilizas para ellos, será un éxito asegurado.

Puedes convertir una caja en una cama-cueva, solo necesitas la caja, una camiseta vieja, y algún imperdible. Corta las tapas de la caja, y ponle la camiseta a la caja de tal manera que la abertura del cuello quede en el lado de la caja donde no hay cartón, esta será la entrada de la cueva, y en el lado contrario, asegúrate de fijar la camiseta para que le quede como un guante a la caja. Para mayor comodidad, utiliza una manta con la que rellenar el suelo de la cueva, y listo, ya tienes una cama perfecta.

También podemos hacer un juguete interactivo con una caja de poca altura, recortando círculos de tamaño suficiente para que entre una pelota, y así que nuestro gato tenga que sacarla a través de los agujeros.

¿Y qué tal construir un castillo? Con cajas de varios tamaños, que se van uniendo para hacer la estructura del castillo, rotuladores, tijeras, y un poco de creatividad, tendremos un super juguete. Podemos hacer varias entradas, ventanas, colocar pelotas de fieltro que puedan cazar,… todo queda en manos de tu imaginación.

La mejor vista siempre está en las alturas.

En casa no tenemos árboles, pero un rascador fuerte y alto no puede faltar, tanto para facilitar la conducta de rascado, como para que nuestro gato tenga un sitio alejado del suelo en el que poder descansar tranquilo.

Además, con viejas repisas o tablones, podemos crear una escalera y pasarelas ancladas a la pared que recorran parte de la casa. Para que sean más cómodas, podemos incluso forrarlas de telas suaves y calentitas.

Las “presas”, fundamentales para su conducta de cazador.

Bolis, coleteros, pinzas de la ropa,… cualquier objeto pequeño que nos dejemos a la vista puede ser una presa, pero si queremos que sea más “real” y seguro para nuestros gatos, podemos hacer fácilmente multitud de juguetes con materiales que tenemos por casa.

Con calcetines rellenos de algodón, incluso con un poquito de catnip, dándole la forma que queramos, podemos tener muñecos. Trozos de tela, alguna camiseta vieja, fieltro… con cualquier retal se puede crear un divertido juguete. Además, seguro que tienes plumas de alguna caña que pasó a mejor vida, puedes pegarlas con cola, incluso utilizar cuerda de esparto para envolver parte del muñeco, de nuevo la imaginación al poder.

El rollo de papel higiénico, un juguete multiusos.

Tal cual ya es divertido, le hacen rodar, le persiguen… pero podemos reutilizarlo de varias maneras.

Podemos crear juguetes interactivos uniendo varios, cerrando las entradas y salidas, y creando otras de menor tamaño para poder meter granos de pienso o premios, de tal manera que tengan que encontrar la manera de que salgan al exterior para comerlos. También se pueden cubrir de tela y rellenar, poner plumas, cuerda, crear pirámides o cuadrados de rollos unidos en las que guardar premios,… tenemos toda la vida de nuestro gato para seguir creando nuevos juegos.

Como ves, es muy fácil y económico que nuestros gatos renueven sus juguetes cada poco tiempo. Además, haciendo nuestros propios juguetes, reutilizamos objetos que de otra manera serían de usar y tirar, aumentamos su vida útil, y al no tener que comprar cosas nuevas, disminuimos la cantidad de residuos, lo que es muy beneficioso para el medio ambiente.

Por supuesto, no podemos olvidar la importancia de la conducta de juego para nuestros gatos, ellos son animales cazadores por naturaleza, necesitan descubrir, curiosear, tener estímulos nuevos, observar,… procura que siempre tenga con qué entretenerse para que sea un gatito sano, feliz y equilibrado.

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