A muchos perros les encanta el agua, a otros no tanto, pero seguro que si piensas en los perros más acuáticos te vienen a la mente algunas razas concretas, y es que desde su origen como raza, han estado ligadas a la pesca, al rescate en medio acuático, a la caza en entornos húmedos, etc, por lo que aún siguen conservando esa parte genética del trabajo que un tiempo atrás desempeñaron.

¿Quieres conocer a algunas de estas razas? ¡No te lo pierdas!

Labrador y golden retriever

Estas dos razas son unas de las más populares, por lo que forman parte de muchísimas familias hoy en día. Son grandes amantes del agua, y es que no solo disfrutan de los baños, sino que físicamente están preparados para el medio acuático. Así, tienen una cola “de nutria” que les sirve como timón, un pelaje denso y resistente, prácticamente impermeable, que le permite aguantar mejor ante temperaturas bajas y la humedad, tienen una capa de grasa un poco más gruesa que otras razas, y membranas entre los dedos de sus patas, lo que les permite nadar más rápido.

El labrador retriever nació con la misión de servir a los pescadores canadienses durante la tarea de recoger utensilios durante las jornadas de pesca: cabos rotos, boyas, los peces que se salían la red,… Si algo caía al agua, el labrador lo recuperaba. Por otro lado, el golden retriever fue criado como perro de caza para recuperar aves acuáticas, así que también tiene un origen ligado al agua.

Caniche

Esta raza también tiene un origen relacionado con la caza, y es que hasta el Renacimiento, era utilizado como cobrador de agua: recuperaba las aves, como patos, que se cazaban y caían al agua. Desciende del antiguo perro de aguas barbet, y su nombre también hace referencia a este origen, de tal manera que su nombre en francés, caniche, deriva de las palabras canard y chien, haciendo alusión a su trabajo de “perro pato”. Curioso, ¿verdad?

Terranova

Esta raza tiene su origen en la isla canadiense de Terranova, son perros grandes y fuertes, que pueden alcanzar los 70 kilos de peso. Fueron criados como perros de trabajo para ayudar a los pescadores en los barcos, recogiendo las redes y recuperando los aparejos que se extraviaban. Es una raza amante del agua, y además tiene una característica física que le permite nadar sin dificultad: sus patas palmeadas gracias a unas membranas interdigitales, así que por esta razón hoy en día siguen trabajando en operaciones de búsqueda y rescate de personas en el agua. Además, su doble manto de pelo les mantiene calientes incluso en aguas heladas.

Perro de aguas español

Su nombre lo dice todo, ¿verdad? Esta raza ayudaba en las embarcaciones, acercando flotadores de señalización, boyas, recogían cabos, incluso podían sumergirse varios metros para recuperar objetos, además de utilizarse en la caza.

Además del español, el perro de aguas portugués o el irlandés son también grandes amantes del agua.

Chesapeake Bay Retriever

Esta raza es pariente del labrador, y como ellos, disfrutan nadando y sumergiéndose en el agua. Su pelaje es casi impermeable, y consiste en una capa interna densa y una capa exterior áspera y resistente al viento. Tiene otra característica, y es que su pelo es aceitoso, lo que lo hace impermeable al agua. En origen, era utilizado principalmente como perro cobrador de aves acuáticas.

Aunque estas razas son algunas de las más acuáticas, son muchos los perros que disfrutan también del agua. Sea la raza que sea, si tu mejor amigo va a tener su primer encuentro con el medio acuático, no debes forzarle a mojarse, si no permitir que él solo vaya acercándose y explorando el entorno. El agua puede ser una fuente de diversión, pero también es un medio peligroso, así que siempre debes tener mucho cuidado y vigilar a tu mejor amigo.

¿Tu perro es de alguna de estas razas? ¿También es amante del agua? ¡Que disfrutéis de los días de playa y piscina!

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