Con la llegada del calor seguro que has notado que tu mejor amigo suelta más pelo, por lo que debemos ayudarle a realizar el proceso de muda, tanto con un buen mantenimiento diario en casa, como con el trabajo de un profesional de la peluquería canina. La salud del pelo y la piel de los perros es muy importante, así que os animamos a leer la información que tenemos preparada para vosotros, ¡seguro que os resulta útil para aplicarla en vuestro amigo perruno!

Muchas razas perrunas, diferentes tipos de pelo

Si piensas en diferentes razas perrunas, seguro que alguna tiene el pelo largo, otra el pelo muy cortito, otra semilargo,… ¿crees que el cuidado de su pelo será igual en todos? No, ¡claro que no! Por eso, en primer lugar debemos saber qué tipo de pelo tiene nuestro perro, y en base a eso, elegir la herramienta.

Razas como el dálmata o el beagle tienen el pelo corto raso, es decir, su pelo es de corta longitud y queda bastante pegado a la piel. Otros perros también tienen el pelo corto, como el labrador o el rottweiler, pero en este caso tienen una doble capa y por tanto más subpelo.

El siguiente tipo de pelo es el semilargo, y con este va aumentando la necesidad de mantenimiento. El pelo semilargo de razas como el setter o el border collie es más fino y no hay un exceso de subpelo, mientras que en otras razas como el husky siberiano o el mastín, también de pelo semilargo, existe un manto más denso con más subpelo en forma de “lana”, por lo que estos necesitan un cepillado más frecuente.

El pelo largo es el que tiene una longitud superior a 6 centímetros. Este tipo es el que mayor cuidado y mantenimiento requiere, ya que de lo contrario se forman nudos, dolor, incluso problemas de transpiración de la piel y termorregulación. Razas como el yorkshire terrier o el bichón maltés presentan pelo largo con un subpelo algodonoso, mientras que el pastor alemán de pelo largo o el samoyedo tienen una doble capa.

Tipos de cepillos y peines

Si miramos para comprar una herramienta para cepillar el pelo de nuestro perro, seguro que nos encontraremos con diferentes opciones, entonces… ¿cuál elegimos?

El peine se utiliza para eliminar la muda y nudos que están enredados en el manto, pero que gracias al paso de la carda ya están abiertos y pueden retirarse fácilmente. Si el manto está muy enredado y los nudos no salen fácilmente, no debe usarse el peine.

La carda sirve para cepillar y desenredar, algunas son suaves y flexibles, pero otras son más duras por lo que hay que tener cuidado con estas últimas para no dañar la piel. Se utilizan para cepillar mantos largos, semilargos y medios, de doble capa y sin ella, ayudando a abrir nudos y el pelo denso.

Los cepillos de goma funcionan por la electricidad estática, así que no son nada agresivos con el manto y la piel, y se recomiendan para mantos cortos con poca densidad.

El vaciador, como su nombre indica, vacía de muda o subpelo, pero solo debe usarse en pelo corto. En capas largas o dobles, puede dañar el manto, así que su uso debe ser muy controlado.

El cepillo de mantequilla es para cepillar y dar brillo, pero no desenreda, por lo que solo debe utilizarse en mantos que ya estén desenredados. Ayuda a eliminar polvo y dar un último retoque al manto.

El rastrillo ayuda a eliminar muda y abrir el manto de doble capa de manto largo, se suele usar después de la carda en mantos densos. Si el manto está enredado, no debe utilizarse.

El cortanudos únicamente debe utilizarse, como su nombre indica, para cortar nudos muy cerrados o de difícil acceso, nunca para quitar muda, ya que es una herramienta muy agresiva que puede dañar mucho el pelo de nuestro perro si se utiliza mal.

Adapta la herramienta al manto de tu perro

Si tienes dudas sobre qué herramientas utilizar en el caso de tu perro, quien mejor puede asesorarte es tu peluquero canino de confianza. No obstante, para que tengas una idea general, podemos resumir que el cepillo de goma es el más indicado para el uso diario en pelo corto, junto con el vaciador cada dos semanas si es pelo corto raso (en doble capa mejor no utilizarlo, ¡cuidado!)

En pelo semilargo y largo, el mantenimiento se realiza con carda y peine, nunca con vaciador, ya que esta herramienta puede dañar el ciclo de crecimiento natural del pelo al arrancar por error el pelo que aún no está preparado para ser mudado. ¿Lo sabías?

Si te gusta la peluquería canina, quieres ampliar tus conocimientos y dedicarte profesionalmente a ello, te animamos a descubrir nuestra formación. ¡Te esperamos!

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