Año nuevo, vida nueva. Ese es el lema que cada enero nos decimos a nosotros mismos, ¿verdad? Aprovechamos el comienzo de año para cambiar aquello que no nos gustaba demasiado del año anterior, para mejorar en ciertos aspectos de nuestra vida, o para emprender nuevos proyectos. Para algunos es hacer más deporte, para otros comer mejor, otros quieren aprender un idioma, quizás cambiar de trabajo, y… ¿por qué no? también puede ser comenzar a visualizarnos estudiando, trabajando o colaborando en eso que siempre nos ha motivado y hemos querido, pero que por el estrés del día a día, las presiones familiares o por determinados motivos personales, nos impedían dar el paso que nos acercara más a nuestro sueño.

Si al leer esto, algo se ha removido en tu interior, es que te sientes identificado o identificada, así que queremos apoyarte y animarte a dar ese empujón que deseas en tu vida. Y si además, eres amante de los animales, sin lugar a dudas tienes que seguir leyendo.

Somos muchos los que amamos a los animales, los que desde pequeñitos teníamos claro que cuando fuéramos adultos nuestra profesión o, al menos, nuestro tiempo libre, estarían relacionados con hacer de este un mundo mejor para el resto de seres vivos que conviven con nosotros. Quizás al ir creciendo se pusieran delante nuestra otras oportunidades laborales, y ese sueño quedó un poco desplazado, pero déjanos decirte que nunca es tarde cuando hay vocación, motivación, y sobre todo amor por lo que se hace.

Quizás querías ser veterinario, biólogo marino, cuidador de animales en refugios y santuarios, peluquero canino, auxiliar técnico veterinario, o cualquiera de las muchas profesiones que cada día velan por la salud y bienestar de los animales, cada una en su campo de actuación correspondiente, pero todas al final con un mismo objetivo: investigar y mejorar la vida de nuestros compañeros los animales.

Y si soñabas con ello, ¿por qué no dedicas este 2018 a cambiar ese trabajo que no te motiva y solo realizas por la remuneración económica, por la formación que cambiará tu vida para mejor, adaptándose a lo que siempre habías querido realizar? Todos tenemos que trabajar para vivir, pero no es lo mismo trabajar solo por subsistir, que trabajar en algo que te llena como ser humano, que completa cada parte de ti, de tu esencia, y que por muy cansado que estés, nunca te arrepientes de realizar, ya que es el trabajo de tus sueños y el motor de tu vida, y además con la gran satisfacción añadida de que gracias a ti otros seres tienen la vida que merecen.

Este año puede ser el que cambie tu vida en la dirección que deseas. Deja a un lado la pereza, la comodidad, el qué dirán, el “ya soy demasiado mayor para esto”, y las mil excusas más que nos ponemos a nosotros mismos cada día para desviarnos de nuestras metas, y saca de ti la valentía para afrontar retos, la pasión, la motivación y la dedicación que reside en tu interior.

aquielvideo

Amar el trabajo que realizamos a diario es fundamental, nos aporta felicidad, y si además supone mejorar la vida de animales, doble felicidad.

Es el momento de emprender la senda de nuestro verdadero camino, olvida el “ya lo haré”, y aprovecha este nuevo año para que en la lista de nuevos propósitos aparezca la profesión que siempre deseaste, escribir a esa asociación de protección animal con la que quieres colaborar desde hace tiempo, o cualquier otro cambio que siempre quisiste realizar pero nunca te atreviste.

Todos nacemos con un sueño, ¿cuál es el tuyo?