En la boca de nuestros perros comienza su salud o enfermedad, y es que la acumulación de sarro y bacterias puede ser muy peligrosa para nuestros mejores amigos.

Por ello, es nuestra responsabilidad cuidar de la higiene bucodental de nuestros animales, de tal manera que realicemos una prevención de los problemas más frecuentes que afectan a la boca: mal aliento, sarro y placa, pérdida de dientes, gingivitis, abscesos, fístulas, y lo que es aún más grave, pero no solemos tenerlo tanto en cuenta: la expansión de bacterias a otras localizaciones del cuerpo.

Además, si tu amigo perruno es de raza pequeña, como el yorkshire terrier o el chihuahua, con más frecuencia puede desarrollar enfermedad periodontal, así que en estos animales es aún más importante realizar una adecuada prevención.

Para el mantenimiento de la higiene bucodental de nuestros animales, hoy en día son muchos los productos que podemos encontrar en el mercado, por lo que seguro que entre todos ellos, alguno se adapta a las necesidades de tu mejor amigo. ¿Quieres hacer un repaso de algunas de las opciones más sencillas? ¡Sigue leyendo!

Dentífrico para perros y cepillado

La opción más conocida, y es que es la que más se parece a lo que las personas utilizamos: cepillo y pasta dentífrica. Dado que para que la pasta realice su acción completa, debe acompañarse del cepillado de los dientes, no siempre es posible dicha manipulación. Algunos animales no permiten que les toquen la boca, y menos aún la introducción de un cepillo de dientes, por lo que en los casos en que el perro no se deje manipular, será necesario optar por otra opción menos invasiva para él.

Spray dental

Para perros y gatos que no permiten la manipulación de la boca, es una opción cómoda, ya que simplemente pulverizando el producto sobre dientes y encías, hará su efecto. Suelen contener clorhexidina, que es un antiséptico, así que mantienen a raya a las bacterias que causan el sarro y placa.

Productos enzimáticos

Suelen ser pastas o geles, cuya composición contiene enzimas, como la amilasa, amiloglucosidasa, o lisozima, que se encargarán de restringir el crecimiento bacteriano, así como de favorecer su destrucción. De nuevo, es una opción para los perros menos colaboradores, ya que solo aplicando una pequeña cantidad del producto, y gracias a la acción de distribución de la lengua, hará su acción. Si el animal se deja, puede utilizarse el cepillado como complemento a la acción enzimática del producto.

Aditivos para el agua

En este caso, el producto es un líquido que se echa directamente en el agua de bebida, así que no requiere de ningún tipo de manipulación para el animal. Por hacer un símil, es parecido a nuestros colutorios, pero se utiliza diluido en el agua diaria que ofrecemos a nuestros animales. A la que beben, tomarán parte de este producto, y les ayudará a disminuir el mal aliento y controlar el sarro.

Snacks masticables

Si nuestros perros pudieran hablar y decirnos qué opción es la que ellos prefieren para su cuidado dental, seguro que elegirían esta: los snacks masticables. Existen muchísimos en el mercado, el ideal es que no contengan un exceso de azúcar ni subproductos, y que sean lo más naturales posibles. Además, si tienen una dureza media o alta, el perro podrá entretenerse durante más tiempo, así como favorecer la fricción del snack con la dentadura y permitir la eliminación del sarro, además de ser un ejercicio perfecto para fortalecer la musculatura de la mandíbula.

Suplementos alimenticios

¿Te suena el alga Ascophyllum nodosum? Existen complementos alimenticios que contienen este alga, y ayudan a disolver el sarro y controlar su acumulación, así como frenar la formación de placa bacteriana. La forma de presentación suele ser en polvo, el cual se añade a la comida del animal, y al ser digerido actúa de manera interna favoreciendo la higiene bucodental, además de ser una fuente natural de diferentes minerales, oligoelementos y vitaminas. Al ser un alga, es un producto rico en yodo, así que si tu compañero perruno padece hipertiroidismo, debes consultar previamente con tu veterinario si podrías añadirlo a su dieta o no.

Cuéntanos, ¿qué opciones de las anteriores conocías para el cuidado de la salud oral de los perros? Si ya utilizas alguna de ellas, ¿cuál es la que mejor funciona a tu compañero de vida?