Pero no solo es un sonido que nos gusta y denota comodidad para nuestro gato, si no que su existencia va mucho más allá. Por ello, en este artículo queremos contaros curiosidades sobre este sonido gatuno, ¡no os lo perdáis!

¿Cómo se produce el ronroneo?

El sonido se produce por la emisión de entre 25 y 150 vibraciones por segundo, pero hoy en día el ronroneo sigue siendo ese enigma que la ciencia no consigue descifrar del todo, de ahí que para explicarlo sigamos hablando de teorías.

Por un lado está la hipótesis de origen mecánico, por la cual los responsables del ronroneo serían los músculos de la laringe. Al temblar de forma muy rápida estos músculos, provocarían una dilatación de la glotis y su inmediata regresión, y esta rápida actividad causaría unas vibraciones al inhalar y exhalar el aire durante la respiración, dando lugar al ronroneo. La otra teoría sustenta que dicho sonido es de origen hemodinámico. Esta hipótesis afirma que el ronroneo se origina en la vena cava posterior, concretamente a la altura del diafragma e hígado, ya que en esta zona los músculos comprimen el flujo sanguíneo, causando unas vibraciones que se transmiten y amplifican a través de los bronquios llenos de aire y la tráquea, hacia los senos de la cabeza.

¿Cuándo empiezan a ronronear los gatos?

La capacidad para ronronear es innata de los gatitos, de ahí que con pocos días de vida ya podamos escucharles ronronear. La madre se comunica con sus gatitos mediante el ronroneo, y gracias a él y a su olor, la mamá gata señala su posición a los gatitos, y les guía para que mamen. Los gatitos suelen utilizarlo para comunicar su estado de ánimo a la madre, emitiendo diferentes frecuencias según la situación: si se encuentran bien, si están asustados, etc.

Significado del ronroneo.

El significado más popular de este sonido es el de satisfacción: el gato ronronea porque está cómodo, le gusta estar con nosotros, le gusta su cama, come y se encuentra satisfecho, etc. Pero no todo lo relacionado con el ronroneo es felicidad.

Cuando un gato no se encuentra bien, está enfermo, ha sufrido un traumatismo, experimenta dolor, incluso en los momentos finales de su vida, también puede ronronear. Hay teorías que defienden que es un mecanismo de los felinos para disminuir el dolor, apaciguarse, incluso que tiene propiedades antiinflamatorias. Si ya de por sí los gatos son maestros en disimular el dolor y el malestar, si nos “engañan” con el ronroneo es aún más difícil detectar en ellos la enfermedad. Por ello, es importante conocer los otros significados del ronroneo, y no siempre asociarlo a un estado feliz.

El ronroneo como método de auto-curación.

En los últimos años, los gatos han ido conquistando cada vez más a los humanos, nos encanta compartir nuestra vida y hogar con ellos, de ahí que el interés por conocerles mejor haya ido en aumento.

Una de las personas que ha demostrado su interés por los gatos es Jean-Yves Gauchet, veterinario francés, y padre de la “ronron thérapie” o ronronoterapia en español.

Gauchet observa que “padeciendo una misma lesión y tras una misma cirugía, los gatos sufren cinco veces menos secuelas que los perros, y que se recuperan tres veces más rápido”.

Por otro lado, Elizabeth von Muggenthaler, presidenta de Fauna Communication Research Institute, en uno de sus trabajos sobre los felinos expone que “las frecuencias entre 20 y 140 Hz favorecen el crecimiento óseo y la curación de fracturas, alivian el dolor, reducen la inflamación, favorecen la cicatrización de heridas, el crecimiento muscular, la reparación de los tendones, mejoran la movilidad de las articulaciones y alivian la disnea pulmonar”.

Tras estos descubrimientos, no hay duda de que el ronroneo de los gatos tiene cierta capacidad de auto-curación. Si vives con gatos, gestionas colonias felinas, trabajas en una protectora, etc seguro que en alguna ocasión has podido observar algún gato que se aleja a un lugar tranquilo, permanece quieto y continuamente ronronea. Probablemente ese gato no se encontrara bien físicamente, y estuviera en ese proceso de “curarse a sí mismo”. Por supuesto, esta capacidad no les exime de visitar el veterinario, y de recibir los tratamientos necesarios, pero sí les alivia, reconforta y acelera su proceso de curación.

Beneficios del ronroneo para las personas.

Jean-Yves Gauchet afirma que “escuchar el sonido del ronroneo estimula las neuronas que producen serotonina, la hormona de la felicidad, y endorfinas, incidiendo en la calidad de nuestro sueño y mejorando nuestro humor”.

Llegar a casa tras un largo día de trabajo, atascos, estrés,… y poder disfrutar de la compañía gatuna es beneficioso tanto física como psicológicamente. Sentarnos en el sofá y que nuestro gato se acerque a nosotros ronroneando nos calma, nos agrada, y enseguida nos sentimos más relajados, incluso… ¿quién no se ha quedado dormido con la agradable melodía gatuna de fondo?

No hay duda de que los gatos son seres excepcionales, ¿tú también has podido disfrutar ya de una buena sesión de ronroneos? ¿Has sentido el beneficio de este sonido en ti?

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