1.- Infórmate sobre los requisitos de cada aerolínea
La mayoría de aerolíneas permiten embarcar a animales domésticos (perros, gatos, tortugas, etc.) mientras cumplan con las limitaciones legales y de documentación. Éstos pueden ser aceptados como equipaje en bodega y en casos muy determinados, en cabina de pasaje.
Cada compañía tiene sus propias normas en cuanto a tasas, peso y tamaño del trasportín. Para saber los requisitos y coste consulta una guía como la que ofrece Skyscanner.
Consultar foros en línea como Reclamador y saber de la experiencia de otras personas, te puede ayudar a determinar qué aerolíneas son las mejor valoradas respecto al transporte de mascotas.
2.- Valora los riesgos
Incluso las mejores aerolíneas tienen una tasa de muerte en animales estadísticamente alta. Golpes de calor, neumonías, fallos cardiacos y síntomas relacionados con la ansiedad suelen ser las causas más frecuentes de fallecimiento.
Ten en cuenta que es muy probable que tu mascota sufra cambios de temperatura, que el trasportín se trate como si fuera equipaje y que éste no esté sujeto con correas en caso de turbulencias.
Algunos animales, como los gatos o perros de nariz aplastada, son más propensos a sufrir de serios problemas respiratorios en las bodegas.
3.- Programa una visita al veterinario
La mayoría de las aerolíneas requieren un certificado médico del animal, expedido poco antes de la fecha de partida. Si la mascota ya tiene algún problema de salud, o es de raza de nariz chata, razón de más para acudir al veterinario para realizar un buen examen que permita identificar si hay algún factor de riesgo potencial.
Seguramente la compañía nos exigirá la cartilla de vacunación del animal al día.
4.- Asegúrate que está bien identificado
Antes de volar, ten en cuenta que tu perro o gato debe estar correctamente identificado, siendo obligatorio el microchip en la Unión Europea. La fecha y la parte del cuerpo del animal en la que hayan sido implantados deben estar registradas en el pasaporte de la mascota.
Asegúrate que la información de contacto esté bien actualizada, para poder localizarte en caso de pérdida lo más pronto posible.
5.- Compra un buen trasportín que cumpla con las normas
Compra un trasportín resistente que cumpla con las normas del gobierno y las aerolíneas. Ten en cuenta que debe tener el suficiente espacio para que tu mascota pueda moverse libremente y voltearse en el trasportín sin toparse con sus paredes. Debemos asegurarnos también que el contenedor no se abra durante el vuelo.
Una vez tengas el trasportín haz que tu mascota se familiarice con ella y no olvides de escribir tu nombre, número de asiento e información de contacto en el trasportín.
6.- Ve con tiempo
Reserva con mucho tiempo ya que algunas compañías no admiten más de cinco mascotas por vuelo.
Haz una lista de todo lo que va a necesitar tu mascota, tanto en el aeropuerto, como en el lugar de destino (pasaporte, plato de agua, medicamentos, juguete favorito, etc.) y preséntate en el aeropuerto con tiempo suficiente.
7.- Infórmate sobre vuestro lugar de destino
Localiza en el lugar de destino una clínica con servicio de urgencias antes de emprender el viaje y anota su teléfono y dirección. Aunque tu mascota goce de buena salud, puede ser que surja algún problema al llegar en el lugar de destino.
Busca cafés, restaurantes, parques y actividades en tu destinación donde tu mascota sea bienvenida (petfriendly).
También vale la pena consultar con la embajada local para averiguar las leyes de cuarentena locales para asegurarte que el país de destino permite la entrada de tu mascota.
8.- Intenta mantener su horario regular
Cuanto más puedas cumplir la rutina diaria del animal, menos estresado estará. Dar un largo paseo y dedicarle un buen rato de juego ayudará a minimizar el nerviosismo. Intenta que haga mucho ejercicio antes de entrar en el avión ya que así estará más cansado y, durante el viaje, más tranquilo.
9.- Prepáralo para el viaje.
Los animales suelen marearse durante el viaje en avión. Una opción para prevenirlo es evitar que coman alimentos, al menos, durante las cuatro horas previas al vuelo. Y, si es muy propenso al mareo y no hace mucho calor, mejor reducir el consumo de agua.
Volar puede causar mucha ansiedad al animal. Puedes preguntar a tu veterinario si te recomienda la prescripción de un tranquilizante. Dado que los sedantes aumentan el riesgo de deshidratación y en la bodega pueden vivir este riesgo, no es aconsejable dormir al animal.
Córtale las uñas para evitar que se enganche y revisa que no quede nada que pueda herir a tu mascota dentro del cajetín. Las correas o collares anchos pueden resultar muy peligrosos.
10.- Advierte que tu mascota vuela contigo
Cuando subas al avión, avisa a la tripulación que tu mascota viaja en la bodega y pregunta si pueden verificar que tu mascota está a salvo en el avión antes de la salida del avión.
Con estos consejos !seguro que tendréis un buen vuelo!